¿Sabías que la calificación energética de tu edificio puede marcar la diferencia entre ahorrar cientos de euros al año o seguir pagando de más por tu consumo?
Además, puede ser la llave para acceder a ayudas públicas, mejorar el confort en casa… e incluso revalorizar tu vivienda.
Muchos propietarios y técnicos aún no saben cómo se calcula, qué significa realmente o qué se necesita para mejorarla.
Otros ni siquiera son conscientes de que tener una mala calificación energética (letra F o G) podría dificultar una futura venta o alquiler.
Y si trabajas en el sector técnico, sabrás lo importante que es cumplir con normativas como el RITE o el nuevo RD 659/2025 para evitar sanciones o ineficiencias costosas.
La buena noticia es que mejorarla es más fácil (y rentable) de lo que parece… y con Envoltia, puedes hacerlo sin adelantar un solo euro.
En este artículo te explicamos:
- Qué es la calificación energética
- Cómo obtener el certificado
- Cómo aplicar las mejoras correctas (aislamiento, aerotermia, geotermia, placas solares…)
- Y qué ayudas públicas puedes aprovechar ahora mismo.
Verás que rehabilitar tu edificio, ahorrar cada mes y vivir mejor no es un sueño lejano.
Es una posibilidad real, tangible… y al alcance de tu comunidad si sigues leyendo.
¿Qué es la calificación energética de un edificio y por qué importa?
La calificación energética es como el “boletín de notas” de un edificio.
Mide cuánta energía necesita tu casa o comunidad para funcionar: calentar en invierno, refrescar en verano, producir agua caliente, ventilar…
Cuanto menos energía necesite, más eficiente es.
Y eso se refleja con una letra, igual que en los electrodomésticos:
- A = Máxima eficiencia (consume poco, emite poco CO₂, ahorra mucho)
- G = Mínima eficiencia (consume mucho, contamina más, derrocha energía)
¿Dónde se ve esa letra?
En la famosa etiqueta energética, que es obligatoria por ley en todas las viviendas que se vendan o alquilen.
También la necesitarás para acceder a ayudas públicas o justificar mejoras en el edificio.
Imagina que vas a comprar una casa. Ves dos pisos: uno es clase B y otro clase F.
¿Cuál crees que consumirá menos calefacción y agua caliente al mes?
Exacto.
La clase B puede suponer un ahorro de hasta el 80% en la factura respecto a la clase F.
¿Qué incluye la calificación?
No solo te dice cuánta energía se gasta. También te da información muy útil sobre:
- El consumo anual de energía (en kWh por metro cuadrado)
- Las emisiones de CO₂ que genera ese edificio cada año
- El tipo de energía usada: ¿gas? ¿electricidad? ¿energía solar?
- La calidad del aislamiento térmico: si el calor se escapa por las ventanas, la fachada, el tejado…
- Los sistemas de calefacción, refrigeración y agua caliente sanitaria (ACS)
Todo esto lo analiza un técnico certificado, que visita el edificio, toma datos, y emite un documento oficial: el certificado de eficiencia energética.
¿Por qué es importante?
Porque afecta directamente a:
- Lo que pagas en tus facturas de luz y gas
- La comodidad de tu casa o edificio (sin corrientes ni frío en invierno)
- La posibilidad de pedir subvenciones para rehabilitación
- El valor de venta o alquiler de tu vivienda
Y, además, porque cada vez más normativas europeas y españolas exigen que los edificios sean más eficientes, con menos emisiones de gases contaminantes.
Una buena calificación energética no solo es buena para el planeta.
Es buena para tu bolsillo, tu salud, tu calidad de vida… y el futuro de tu edificio.
El certificado energético explicado para no perderte
El certificado energético es un documento oficial y obligatorio que indica cuánta energía necesita una vivienda o edificio para funcionar correctamente: calentar, enfriar, ventilar y producir agua caliente.
Es como una radiografía energética de tu casa.
Te dice si es eficiente (consume poca energía) o si derrocha (consume mucho y contamina más).
Además, te orienta sobre cómo mejorarla para ahorrar y contaminar menos.
¿Cuáles son los niveles de eficiencia energética de las viviendas?
El certificado da una calificación energética de la A a la G.
Esas letras indican el nivel de eficiencia energética del edificio, basándose en dos cosas:
- Cuánta energía consume al año
- Cuántas emisiones de CO₂ genera
Las letras significan lo siguiente:
- A → Muy eficiente (consume muy poco y contamina poco)
- C – D → Nivel medio (consumo aceptable, pero mejorable)
- F – G → Poco eficiente (consume mucho, gasto alto, y emite más CO₂)
Un edificio clase A puede gastar hasta un 90% menos energía que uno clase G.
Eso se nota en el bolsillo… y en el planeta.
¿Cómo se calcula el certificado?
Lo realiza un técnico competente (arquitecto, ingeniero o similar) que:
- Visita el edificio o vivienda para recoger datos reales:
- Superficie útil
- Aislamiento (fachadas, ventanas, tejado…)
- Sistemas de calefacción, refrigeración y agua caliente sanitaria
- Orientación, tipo de iluminación, ventilación, etc.
- Introduce toda esa información en un software oficial del Ministerio (como CE3X o HULC).
- El programa calcula:
- El consumo anual de energía primaria (la que llega del exterior: electricidad, gas, etc.)
- Las emisiones anuales de CO₂
- El rendimiento general del edificio
- El resultado se traduce en:
- Una letra (de la A a la G)
- Datos detallados sobre el comportamiento energético
- Una propuesta de mejoras concretas para subir de letra y ahorrar
¿Cuándo es obligatorio tener el certificado energético?
En España, el certificado es obligatorio por ley en estos casos:
- Si vas a vender o alquilar una vivienda, local o edificio
- Si vas a pedir subvenciones públicas para rehabilitación energética
- Si haces reformas importantes (por ejemplo, cambiar el sistema de calefacción o rehabilitar la fachada)
- En todos los edificios de obra nueva
- Para justificar deducciones fiscales por eficiencia energética
Si no lo tienes en alguno de estos casos, podrías recibir una sanción o incluso bloquear una venta.
Además, el certificado energético también te puede servir para conseguir:
- Bonificación en el IBI: algunos ayuntamientos aplican hasta un 20% de descuento en el IBI según la calificación energética del certificado; cuanto mejor la letra, mayor el ahorro.
- Reducción del tipo de interés de tu hipoteca: algunas entidades ofrecen hipotecas verdes con mejores condiciones para viviendas con calificación energética A o B, como menor interés o sin comisión de apertura.
Qué viviendas están exentas de disponer del certificado de eficiencia energética
No todas las viviendas están obligadas a disponer de certificado de eficiencia energética.
Según el RD 390/2021 están exentas en estos casos:
- Viviendas aisladas (sin contacto con otros edificios) cuya superficie útil sea menor de 50 m².
- Edificios completos (como una casa unifamiliar) que se compren para su demolición o para realizar reformas estructurales importantes.
Estas excepciones no aplican a viviendas dentro de bloques residenciales.
En caso de reforma o demolición, debe constar por escrito en la compraventa y acompañarse de una declaración responsable ante el organismo autonómico.
Una vez terminada la obra, sí será obligatorio emitir un nuevo certificado (uno durante el proyecto y otro al finalizar la obra), ambos registrados oficialmente.
¿Qué contiene el certificado?
- La etiqueta energética con la letra obtenida (de la A a la G)
- El consumo estimado en kilovatios/hora por m² al año
- Las emisiones de CO₂ anuales
- El tipo de energía utilizada: gas, electricidad, solar, etc.
- Recomendaciones para mejorar la calificación
- Datos técnicos sobre el aislamiento, las instalaciones y el comportamiento del edificio
Además, se registra oficialmente en el organismo de tu comunidad autónoma.
Diferencias entre calificación energética y etiqueta energética
Aunque muchas veces se confunden, no son lo mismo:
Calificación energética:
Es el resultado técnico que indica cómo de eficiente es una vivienda o edificio.
Lo calcula un profesional autorizado tras analizar el aislamiento, sistemas de calefacción, consumo, etc.
Se expresa con una letra (de la A a la G), igual que en los electrodomésticos.
Etiqueta energética:
Es el documento visual que muestra esa calificación de forma clara y rápida.
Sirve para que cualquier persona entienda si un edificio o aparato es eficiente… o no.
Además de la letra, también incluye otros datos útiles como el consumo anual en kWh, las emisiones de CO₂.
Esta es la imagen de la etiqueta energética de un edificio con la máxima eficiencia, tanto en consumo de energía primaria no renovable como en emisiones de dióxido de carbono:
En resumen:
- La calificación es el resultado técnico.
- La etiqueta es cómo se muestra ese resultado para que el consumidor lo entienda fácilmente.
¿Cuánto cuesta obtenerlo?
El precio depende del tipo de vivienda, su tamaño y la zona.
De media:
- Piso: entre 50€ y 150€
- Edificio completo: puede superar los 400€
Evita ofertas que parezcan demasiado buenas. Si no hay visita técnica, no es válido.
En Envoltia, el certificado forma parte del proceso de rehabilitación integral.
Si tu comunidad rehabilita con nosotros, nos encargamos de todo, incluido el certificado, sin que tengas que preocuparte de buscar un técnico ni pagar aparte.
¿Qué dice la normativa actual? (RD 659/2025 y EPBD)
En los últimos años, Europa está impulsando leyes más exigentes para que los edificios consuman menos energía, contaminen menos y sean más sostenibles.
Y España ha tenido que ponerse al día.
El nuevo Real Decreto 659/2025, junto con la directiva europea EPBD (Energy Performance of Buildings Directive), cambia muchas cosas sobre cómo deben construirse, reformarse y certificarse los edificios.
¿La meta? Que los edificios en los próximos años:
- Consuman menos
- Sean más eficientes
- Y acaben siendo prácticamente neutros en emisiones
El pasaporte de renovación y el edificio de consumo casi nulo (ECCN)
Uno de los conceptos más importantes que introduce esta nueva normativa es el llamado “pasaporte de renovación”.
¿Qué es el pasaporte de renovación?
Es un plan personalizado para mejorar tu edificio paso a paso.
- Analiza el estado actual de eficiencia energética del edificio.
- Propone mejoras graduales (aislamiento, cambio de caldera, placas solares, etc.).
- Marca un calendario de actuación para que, en unos años, el edificio sea mucho más eficiente.
Piensa en él como un «itinerario energético».
No tienes que hacerlo todo de golpe, pero sí comprometerte a avanzar poco a poco.
Por el momento se trata de un documento voluntario para los propietarios de edificios.
¿Qué es un Edificio de Consumo Casi Nulo (ECCN)?
Son edificios que necesitan muy poca energía para funcionar (calefacción, refrigeración, agua caliente, ventilación…)
Y además, esa energía debe venir en su mayoría de fuentes renovables.
En otras palabras: un edificio bien aislado, con sistemas eficientes (como aerotermia) y, si es posible, con energía solar.
La normativa europea quiere que todos los edificios nuevos, y los que se rehabiliten en profundidad, se acerquen a este modelo.
¿Todo esto afecta a propietarios, compradores o arrendadores?
Sí, y mucho.
Esta normativa no es solo para técnicos o constructores.
Tiene impacto real en la vida de cualquier persona que tenga una vivienda o esté pensando en comprar, vender o alquilar.
Veamos a quién afecta y cómo:
Propietarios
- Si vas a reformar tu edificio o vivienda, deberás cumplir con ciertos requisitos de eficiencia energética.
- Si no mejoras tu calificación energética, podrías perder acceso a ayudas o bonificaciones fiscales.
- Si tu vivienda es clase F o G, en el futuro podría tener restricciones para venderse o alquilarse.
Compradores
- Deberás recibir el certificado energético actualizado antes de firmar.
- Este documento afectará el valor de la vivienda y sus gastos mensuales en energía.
- Algunas hipotecas verdes solo se conceden a viviendas con buena eficiencia.
Arrendadores
- Si alquilas una vivienda, estás obligado a entregar el certificado energético.
- Si tiene mala calificación (F o G), es probable que te exijan mejoras en los próximos años.
- En algunos casos, se plantea que no se podrá alquilar sin alcanzar un mínimo de eficiencia.
Resumen sencillo:
La normativa busca que los edificios sean más sostenibles, baratos de mantener y menos contaminantes.
Y para conseguirlo, exige mejoras reales, certificadas, y orientadas a largo plazo.
¿Y la buena noticia?
Que puedes hacer esas mejoras con ayudas públicas y, si lo haces con Envoltia, sin adelantar dinero y a coste cero.
Porque aceptamos la cesión del pago de la subvención y financiamos el resto al 100%.
Cómo mejorar la calificación energética de tu edificio (o vivienda)
Mejorar la calificación energética no es complicado si sabes por dónde empezar.
Aquí te explico, con ejemplos reales y en lenguaje claro, qué puedes hacer para subir de letra en la etiqueta energética y ahorrar cada mes.
Aislamiento térmico, envolvente y ventanas
Lo primero que hay que revisar es cómo se comporta tu edificio frente al frío y al calor.
- ¿Se escapa el calor en invierno?
- ¿En verano parece un horno?
- ¿Tienes que poner la calefacción o el aire acondicionado todo el día?
Si has respondido que sí… entonces necesitas actuar sobre lo que se llama la envolvente térmica.
Es decir, todo lo que separa el interior de tu vivienda del exterior:
- Suelos
- Fachadas
- Cubiertas o tejados
- Y, por supuesto, ventanas
¿Qué puedes hacer?
- Colocar aislamiento en la cubierta o tejado
- Evitar filtraciones de aire y mejorar el sellado de huecos
- Aislar la fachada con materiales térmicos (por fuera o por dentro)
- Sustituir ventanas antiguas por otras de doble vidrio con rotura de puente térmico
Esto ayuda a mantener una temperatura estable en casa durante todo el año.
Y lo mejor: reduce el gasto en calefacción y aire acondicionado hasta en un 50%.
Aerotermia, geotermia y otras fuentes de energía renovables
Una vez que tu edificio no pierde calor, el siguiente paso es cambiar los sistemas antiguos por otros más eficientes.
Y aquí entran en juego tecnologías limpias y modernas que aprovechan la energía del entorno.
¿Qué es la aerotermia?
La aerotermia es un sistema que extrae energía del aire exterior para calentar tu casa, enfriarla en verano y producir agua caliente.
Funciona como una bomba de calor y puede reducir el consumo eléctrico en un 70% respecto a sistemas tradicionales (como calderas de gas o gasoil).
- No emite humos ni CO₂.
- No necesita quemar combustibles.
- Se puede combinar con placas solares.
¿Y la geotermia?
La geotermia hace lo mismo, pero usando el calor del subsuelo.
Es muy eficiente, aunque requiere más obra (ideal para viviendas unifamiliares o edificios con patios o jardines).
Otras fuentes renovables:
- Energía solar térmica: calienta agua usando el sol.
- Energía fotovoltaica: genera electricidad con paneles solares.
- Biomasa: usa pellets o restos vegetales como combustible natural.
Todas estas fuentes ayudan a reducir el consumo de energía primaria no renovable y las emisiones de CO₂.
Y sí: mejoran directamente la calificación energética de tu edificio.
Producción eficiente de ACS, calefacción y refrigeración
ACS significa agua caliente sanitaria.
Y junto con la calefacción y la refrigeración, representan el mayor consumo energético en una vivienda.
Por eso es vital que los sistemas que los generan sean:
- Eficientes
- Sostenibles
- Económicos
¿Qué puedes hacer?
- Sustituir la vieja caldera de tu edificio por una bomba de calor de aerotermia
- Instalar un sistema que lo haga todo: calentar, enfriar y dar agua caliente desde un solo equipo
- Acompañarlo con acumuladores bien aislados para guardar el calor sin pérdidas
- Usar termostatos inteligentes y control por cada vivienda.
De esta forma, si vives en un edificio con varias viviendas, es posible instalar un sistema centralizado y luego medir el consumo individual de cada vecino.
Así, cada uno paga sólo lo que gasta, y se evita la típica injusticia de que unos paguen por otros.
Con sistemas modernos puedes ahorrar hasta un 70% en calefacción y ACS, subir varias letras en la etiqueta y acceder a ayudas públicas.
¿Qué ayudas hay disponibles para mejorar la eficiencia energética?
Las ayudas públicas disponibles para mejorar la eficiencia energética de edificios son las ayudas Next Generation (procedentes de fondos europeos).
Además, también existen otras bonificaciones fiscales a nivel nacional o local.
De esta forma, si estás pensando en aislar tu edificio, cambiar la caldera por una bomba de calor o instalar placas solares, esto te interesa… y mucho.
Vamos a verlo.
Ayudas Next Generation y deducciones fiscales
Las ayudas Next Generation son fondos europeos gestionados por el Gobierno de España y las comunidades autónomas.
Su objetivo es fomentar que los edificios:
- Consuman menos energía
- Sean más sostenibles
- Reduzcan las emisiones de CO₂
¿Cuánto cubren?
- Hasta el 80% del coste total de la obra, si consigues mejorar la calificación energética del edificio.
- Algunas comunidades también ofrecen subvenciones adicionales, según el caso.
- Puedes beneficiarte de deducciones fiscales en tu declaración de la renta (IRPF) de hasta un 60%, si mejoras la eficiencia energética de tu vivienda habitual.
- En algunos municipios, hay bonificaciones en el IBI o en licencias de obra.
La parte negativa de estas ayudas es que las comunidades de vecinos tienen que adelantar el dinero de la subvención y esperar a recibirlas pasado un tiempo para recuperarlo.
Pero esto no ocurre con Envoltia porque somos nosotros quienes adelantamos el dinero.
Para ello -si los vecinos están de acuerdo- aceptamos la cesión de la subvención como parte del pago.
¿Y qué ocurre con la parte que no cubre la ayuda?
Te la financiamos al 100%.
De manera que podrás pagarla sin enterarte con el ahorro que vas a conseguir.
Este es el motivo por el cual siempre decimos que podrás rehabilitar por completo tu edificio…
Sin adelantar dinero y a coste cero.
¿Cómo acceder a las subvenciones? ¿Qué cubren?
Aquí es donde muchas personas se bloquean:
¿Cómo se pide la ayuda? ¿Qué papeles hay que presentar? ¿Qué se considera válido?
Si decides trabajar con Envoltia, este es el paso a paso general que seguimos una vez aceptado el proyecto por parte de la comunidad:
- Estudio energético previo
Llevamos a cabo un estudio en profundidad donde analizamos cómo es tu edificio y qué mejoras necesita para reducir el consumo.
- Presentación del proyecto y solicitud de ayuda
Tiene que estar firmado por técnicos acreditados (arquitectos o ingenieros) y cumplir los requisitos del programa.
- Ejecución de las obras
Las mejoras deben conseguir un ahorro mínimo de energía (normalmente entre un 25% y un 60%, dependiendo del tipo de ayuda).
- Justificación de la mejora
Se entrega una certificación energética antes y después de la obra que demuestra el salto de letra conseguido.
¿Qué gastos están cubiertos?
Las ayudas se pueden usar para cubrir:
- Aislamiento de fachadas, cubiertas y suelos
- Sustitución de ventanas por otras más aislantes
- Renovación de calderas, aire acondicionado o sistemas antiguos por aerotermia, geotermia, etc.
- Instalación de paneles solares térmicos o fotovoltaicos
- Sistemas de monitorización y control del consumo energético
- Costes de redacción del proyecto técnico, certificados y dirección de obra
- Instalación de sistemas de recarga de vehículos eléctricos con control de consumo individual
En Envoltia te acompañamos en todo este proceso:
Desde el estudio inicial, pasando por la solicitud de ayudas, la obra, la certificación final… y sin que tengas que mover un dedo.
Rehabilitar a coste cero: así trabaja Envoltia
¿Te gustaría rehabilitar energéticamente tu edificio sin tener que poner dinero por adelantado?
¿Y que alguien se encargue de todo el papeleo, las obras, las ayudas y la financiación, sin líos, sin sustos y con garantías?
Pues eso es exactamente lo que hace Envoltia.
Y lo mejor es que no tienes que adelantar ni un euro.
Ya te lo comentamos más arriba…
Una de las mayores barreras que tienen muchas comunidades de vecinos o propietarios para rehabilitar su edificio es clara:
No hay dinero en la cuenta, o no todos los vecinos pueden pagar ahora.
Envoltia lo resuelve con una fórmula sencilla, segura y muy ventajosa:
¿Cómo funciona?
- Analizamos gratuitamente tu edificio y te decimos qué mejoras necesitas y qué calificación energética podrías conseguir.
- Te ayudamos a solicitar las subvenciones públicas disponibles (como las ayudas europeas Next Generation).
- Tú cedes el derecho a cobrar esa ayuda a Envoltia, y nosotros la gestionamos directamente con la administración.
- Si hay una parte del coste que no cubre la subvención (por ejemplo, el 20% restante), nosotros la financiamos al 100%, con cuotas flexibles para la comunidad (podrás pagarlas con el ahorro que conseguirás).
Resultado: no adelantáis dinero, no tenéis que pedir préstamos a un banco y no asumís riesgos.
Lo único que hacéis es mejorar vuestro edificio… y empezar a ahorrar desde el primer mes.
Conclusión: obtén tu certificado energético y mejora tu edificio desde hoy
Si has llegado hasta aquí, ya sabes que la calificación energética de tu vivienda o edificio no es solo una letra en un papel.
Es mucho más que eso:
- Es el reflejo de cuánto consumes, gastas y contaminas.
- Es la puerta de entrada para acceder a ayudas, revalorizar tu vivienda y vivir mejor.
- Y sobre todo, es una oportunidad para hacer cambios inteligentes que te beneficien hoy… y te preparen para el futuro.
La buena noticia es que no estás solo.
Envoltia puede ayudarte a:
- Conocer la calificación energética de tu edificio
- Saber qué mejoras necesitas para ahorrar y subir de letra
- Conseguir las ayudas públicas que te corresponden
- Rehabilitar de forma integral y profesional
- Y hacerlo todo sin adelantar un solo euro
Así de claro. Así de fácil.
¿Por dónde empezar?
Solo tienes que dar un paso y solicitar una asesoría gratuita con Envoltia.
Nos encargamos del estudio gratuito, la tramitación de subvenciones, el proyecto técnico, la obra y la financiación.
Tú no tienes que hacer nada más que decir: “Sí, quiero mejorar mi edificio”.
Porque un edificio más eficiente no solo ahorra energía.
También mejora tu calidad de vida, cuida el medio ambiente y aumenta el valor de tu vivienda.
No esperes a que sea obligatorio. Hazlo ahora y empieza a ahorrar desde ya.
Contacta con Envoltia y da el primer paso hacia un hogar más eficiente, sostenible…
